extrañas tardes sombrías
en las que asfixia lo irreparable
la certeza de que todos vamos a morir
el declive el desgaste la agonía
hagamos lo que hagamos
vivamos como vivamos
todos vamos a morir
los seres que amas
lo que llevas por dentro
convertido en cenizas
para qué la lucha la deriva
para qué todo este esfuerzo
queman los minutos
las horas pasan los días
las horas pasan los días
los caminos que nunca tomaste
las puertas que no abriste
lo que pudo o debió ser
oprime la angustia
se agita en el pecho
frenético el corazón
frenético el corazón
circula acelerada
la sangre en las venas
la sangre en las venas
y el invierno
como una mortaja
como una mortaja
te hiela por dentro
la fiesta
piensas
ahora está
en otro lugar
Vicente Muñoz Álvarez
Tardes sombrías que nos alimentan.
ResponderEliminarLas conozco, Vic.
Fuerte abrazo, bro