Por Marisa Fernández
(Servicio de Bibliobuses de la Diputación de León)
Regresiones es una novela escrita por Vicente Muñoz Álvarez sobre el León subterráneo de las décadas de los 80 y 90. Escribe sobre la cultura que iba creciendo con efervescencia al margen de la cultura oficial, escribe también como homenaje a una generación de músicos, escritores y artistas que eclosionaron de una forma natural con la llegada de la democracia y la libertad a España de la mano de la transición. Una época llena de arte desarrollándose como un camino natural y lógico después de la dictadura. Esa movida de los 80 que imbuyó el espíritu de España también se dio en aquel León de provincias, y Vicente Muñoz Álvarez nos narra con una mirada introspectiva la vida del León de su infancia, adolescencia y juventud. Un recorrido autobiográfico por un periodo que abarca tres décadas. Los recuerdos de la niñez, en los años 70, y la adolescencia y juventud en los 80/90.
Regresiones es una novela escrita en primera persona, que narra con destreza y ternura, y también sin concesiones parte de los recuerdos de Vicente Muñoz Álvarez. Recuerdos puntuales, diseccionados bajo epígrafes muy descriptivos (93) y acotando como subtítulos entre paréntesis lo que parece ser a veces el recuerdo de una sensación o la descripción del leitmotiv de la regresión. El autor se desnuda ante los lectores, desnuda sus recuerdos, desnuda todo lo que en su vida le ha configurado como la persona y el escritor que es.
A través de 235 páginas se produce la magia que atrapa al lector; nos devuelve a una época que en palabras de Julio César Álvarez es “un canto a un tiempo que no volverá”, y esa magia se produce porque de forma intuitiva el lector vuelve a su propia vida. Consigue de esta forma el autor que nos identifiquemos con él y que seamos cómplices página a página del relato de su propia vida; porque los que vivimos aquellos años recordamos cada uno de los escenarios de su memoria y nos asombra la lucidez con que abre la puerta de su infancia y de su juventud y nos lleva por caminos que nos hacen recorrer también nuestra propia memoria.
Estructura de la obra:
PRÓLOGO por Julio César Álvarez
VISTA DE PÁJARO (poema)
LA DICTADURA: Estigma (18 epígrafes)
LA TRANSICIÓN: Fiesta (24 epígrafes)
LOS 80: Héroes (27 epígrafes)
DÍAS EXTRAÑOS: Temblor (22 epígrafes)
CODA (2 epígrafes) (epílogo)
OJO DE PEZ (20 epígrafes) (epílogo coral con 19 músicos y escritores de su generación que escriben sobre “Regresiones”)
La obra está prologada por el también escritor Julio César Álvarez y contiene un apéndice a modo de epílogo coral de 19 músicos y escritores de su generación. Se inicia con un poema (vista de pájaro) que nos sitúa al autor en su contexto de forma emotiva y directa y que es la antesala de lo que nos depara la obra, un texto de un narrador excepcional escrito de una forma impecable.
La primera parte del libro titulada “LA DICTADURA: Estigma” nos habla del León de provincias de los años 70 a través de la mirada de un niño, el propio Vicente Muñoz; entretejiendo su vida con la imagen de la ciudad en la que vivía. Construye esta parte a través de 18 epígrafes [Regresiones] que configuran sus recuerdos más significativos que se van entremezclando, creando un retrato de su propia vida y de todo lo que le rodeaba en ese momento. Así nos cuenta el descubrimiento de la muerte (Morir: el diablo) , la relación tan estrecha con su familia (manzanas de caramelo/ Los cromos / platillo volador/ Cangrejo de río/ casa Botines…) un niño que juega y sueña, que recorre la calle Ancha, que cambia sus cromos al pie de la casa de su abuela en el edificio botines, que pasea con su padre por la plaza mayor y la catedral….y que recuerda su colegio, los Agustinos, y su parche en el ojo que en cierto modo el propio autor señala como un principio de estigmatización que marcó para siempre la diferencia, y le hizo buscar infatigable su propio destino.
El autor sorprenderá al lector por la abundancia de datos puntuales y recuerdos tan lúcidos que ofrece en este relato.
La segunda parte del libro titulada “LA TRANSICIÓN: Fiesta” comienza con un capítulo titulado “Franco ha muerto (Así comenzó la fiesta)” y durante 24 capítulos breves Vicente Muñoz nos deja ver el adolescente en el que se convirtió. Y también una ciudad que va cambiando al ritmo de los nuevos aires de libertad. Esta parte del libro es sin duda la que nos desvela cómo se va forjando el escritor que ha llegado a ser. Habla de sí mismo, de sus intereses, de su avidez de conocimiento, de lo que leía, de las películas que veía, de sus pasiones y sus animadversiones pero también habla de aquel León, de sus cines, de sus salones de juegos, de los veranos en el Pantano de Luna, de la casa al lado del Cine Mary (Villa Asunción), de la montaña de León ….en un retrato de los hijos sietemesinos de la democracia que hace que el lector no quiera que se acabe nunca el libro. Una narración tierna, sin artificios ni engaños, con la memoria intacta, un relato desde el corazón, nostálgico, un mapa interior del autor, de visiones y recuerdos que no nos dejan indiferentes y que el lector siente en la piel como suyos propios. Además Vicente Muñoz nos da las claves documentales de la época; termina este relato de la transición con un capítulo dedicado al 23 de febrero de 1981, al golpe de estado.
La tercera parte del libro titulada “LOS 80: Héroes” es un canto a una generación, la suya propia, para recordarse y recordarnos el León de la Movida y no dejarlo perdido en la memoria. Testigo de una época excepcional, ve eclosionar una cultura subterránea de una España y de un León que hay que contar y del que también es protagonista… “Me miro en el espejo y soy feliz” así comienza esta parte, con una frase del grupo de música Parálisis Permanente.
Nos sumerge a través de 27 capítulos en la denominada MOVIDA, la eclosión de la música nacional con una fuerza imparable (Volver al Colinón), aquel fue también el momento en que el autor nos cuenta en sus Regresiones como creó su propio grupo Veredicto final (Veredicto Final /Platillos Paistes verdes). Los conciertos en León, la Mandrágora y la Tropicana, los grupos de León (Cardíacos, Deicidas….), las noches del Toisón, también nos habla de los grupos españoles que aún resuenan en sus regresiones (Songs of my life: Gabinete Caligari/ Smash)
Pero en esa galaxia maravillosa y lejana que fueron los 80, en palabras del autor, en ese tiempo Vicente Muñoz se hizo el escritor que es, su pasión por el cine y la literatura de terror, su frenesí gótico y su percepción de la vida le llevaron a mediados de los 80 a empezar a escribir sus propios relatos al amparo de la recién estrenada cultura underground o subterránea que también acabaría llenando la ciudad de manifestaciones culturales al margen de la cultura oficial. Imprescindible el capítulo titulado Underground (pág. 125) para conocer las fuentes o las influencias del autor. Se suceden por los distintos capítulos o regresiones toda una lista de escritores, libros, películas, revistas… que definieron definitivamente el rumbo de su literatura, fundamental el capítulo Malditos (pág.137) en el que nos cuenta qué y quién le marcó definitivamente para ser el escritor que es.
Nos habla también de sus filias y sus fobias (frenesí gótico / tunos & papones), de los garitos de noche, del Barrio Húmedo (el hígado y la piel), de las acampadas, del ácido (Ácido [y el país de las maravillas/ Panorámix]) como experiencia mística en la búsqueda de sí mismo, y de Castaneda (la realidad es otra y aparte…). Recuerda a sus amigos, sus hermanos en el viaje de la vida (Gabi Oca Fidalgo/ César Fernández/ Vinalia Trippers).
“Los 80: Héroes” es el retrato de una generación que gestó la cultura outsider y subterránea del León de los 80 y que Vicente Muñoz narra como si estuviera allí de nuevo “benditos 80, hacia vosotros caigo de nuevo…aunque no haya carretera”
La última parte de éstas cuatro “DÍAS EXTRAÑOS: Temblor” es un relato autobiográfico en tiempo presente alejado ya de los 80, un relato sincero, valiente del escritor y hombre que es, como una conclusión de todas las regresiones. Esta parte en mi opinión muestra un Vicente Muñoz más maduro, más lírico y dando claves de lo que ahora siente y hacia dónde va… “el caso es estremecerse y que las cosas te atraviesen la piel” (temblor: la pasión y las lágrimas) [pág.166]. Pero también nos habla de viajes, amigos y sueños… Pura vida y libertad.
“Mézclalo todo dentro de ti, tus sentimientos, tu vida y tu pasión, tu pasado y tus experiencias, tus regresiones y fantasmas, tu ira y tu felicidad, las personas que has amado y las que te han amado a ti (…) y luego quédate con la esencia, lo que eres aquí y ahora, estos latidos, este momento, el tiempo que desgasta y renueva…hasta arrancar de nuevo”
(Regresiones. Mixtura: the blues. pag.184 )
CODA: epílogo (Mirantes Shangri-La/ This is the end)
OJO DE PEZ. Apéndice: Epílogo coral de 19 escritores y músicos de su generación que escriben sobre Regresiones.
Para abordar la lectura, el debate (próximo jueves, 9 de febrero) y el encuentro con el autor (jueves 16 de febrero) podemos plantearnos los siguientes interrogantes:
Sobre la obra y su estructura
¿Encuentras que es una obra fácil para encajar en un género determinado? ¿Qué crees que es esta obra: una autobiografía, unas memorias, una crónica, un retrato (alternativo de la ciudad de León)…? ¿Piensas que el autor pretende hacer un relato autobiográfico que sirva como retrato de una generación?
¿Cuál crees que es la intención del autor al escribir “Regresiones”?
¿Cómo crees que el escritor se retrata así mismo en la obra?
“Regresiones” ¿te parece una obra nostálgica?
¿Qué opinas de la estructura del libro? ¿Qué valor le das a la coda? ¿por qué crees que los 20 epígrafes finales se agrupan bajo el título “Ojo de pez”? ¿qué ofrece de especial este encuadre que veas en los últimos epígrafes?
¿Qué impresión te produce respecto a las partes anteriores la parte titulada Días Extraños? ¿Encuentras que hay un tono distinto en la narración?
¿Crees que a pesar de la fragmentación de la obra en 93 epígrafes o regresiones como fashbacks hay una continuidad en la narración?
En el libro hay temas que se repiten ¿Crees que las repeticiones responden a algún propósito?
¿Te parece interesante la imagen recurrente del Shangri-La aplicado a distintos lugares a lo largo de la obra?
¿Encuentras interesantes las referencias literarias en la obra? ¿Y las referencias de cine, música en la obra …?
Sobre la época de la que habla
“Todo está en la infancia, recupérala” ¿estás de acuerdo con esta afirmación?
¿Ofrece esta obra una visión que tú recuerdes del León de los años 80?
¿Crees que el capítulo titulado Underground (pág. 125) define la contracultura de los 80 en León? ¿la refleja, la idealiza?
¿Crees que los 80 fueron una “galaxia maravillosa y lejana” como afirma Vicente Muñoz?
La obra refleja la vida de una generación en el León de los años 80. ¿Solo eso? ¿se podría extrapolar este retrato generacional y local a cualquier otra ciudad de provincias en la España de la época?
Y sobre ti:
¿Has vivido directamente alguna de las épocas de las que habla el autor? ¿conecta esta obra con alguno de tus recuerdos?
¿Qué parte te llama más la atención o conecta mejor contigo, te sientes identificado con algunas regresiones como mapa interior también tuyo?
¿Qué opinas de la edición del libro: cubierta, elección del blanco y negro…etc?
¿Hay algo que no te haya gustado del libro?