Poesía alternativa.
Ayer se presentó en Zaragoza la antología “23 Pandoras”, que incluye versos inéditos de tres jóvenes poetas aragonesas: Brenda Ascoz, Carmen Ruiz y Almudena Vidorreta.
JUGANDO CON LA CAJA PROHIBIDA
Dice la mitología griega que Pandora, creada a imagen y semejanza de los dioses, fue la causante de los males de la humanidad al destapar una cajita que contenía un amplio repertorio de desgracias. Quizá un libro de poesía –aquella arma cargada de futuro- no pueda desencadenar plagas como las de Egipto, pero puede servir para escarbar en las conciencias y disfrutar de voces pasionales, combativas y feroces como la Pandora misma.
“No hemos seguido ningún criterio generacional ni estético, he preferido decantarme por la visceralidad” explica el antólogo Vicente Muñoz, que ha reunido en “23 Pandoras” (Baile del Sol, 2009), a otras tantas mujeres jóvenes que se asoman con fuerza a la lírica española. “No quería voces que fueran academicistas, del canon clásico de la poesía, sino textos más pasionales que conviertan al lector en su cómplice”, explica Muñoz sobre la obra que anoche se presentó en El Pequeño Teatro de los Libros de Zaragoza (C/ Silvestre Pérez, 21).
La antología, que “no es una nómina cerrada ni sectaria, sino tan solo un botón de muestra”, incluye a tres jóvenes poetas aragonesas: Brenda Ascoz, Carmen Ruiz y Almudena Vidorreta, la más joven de las 23 reseñadas. También aparece en el libro Miriam Reyes, que aunque es gallega, se ha “formado” en Zaragoza, con lo que se puede decir que Aragón aporta tres poetas “y media” al listado de pandoras. Del norte llegan escritoras “con un tono más intenso, serio, reposado”, las voces del sur son –acaso- “menos graves, más frívolas, jugando con lo cómico”, opina Muñoz, que se felicita porque las autoras “son muy versátiles: hay actrices, blogueras, diseñadoras, y no se identifican con el papel tradicional de la poetisa aislada”.
Precisamente, una de las más “teatreras” es Carmen Ruiz, para quien el libro es “un ejemplo de la variedad del compromiso que ofrece la poesía actual escrita por mujeres. Voces intimistas, guerreras, provocadoras, reivindicativas, introspectivas… Es también una muestra interesante de trabajo colectivo, de toma conjunta de decisiones, desde el título (que generó un debate más que encendido, los mails cruzados iban que volaban) a la portada o la estructura de la obra”. Desde que comenzó a gestarse la antología, todo este proceso ha podido seguirse en el blog (http://23pandoras.blogspot.com/) , que en estos días está que echa humo debido al “tour” promocional que se están marcando las pandoras. El lunes el libro se presentó en el Fnac de Callao, en pleno centro de Madrid y, después de la presentación maña de ayer, toca visitar otras plazas como Logroño, Vitoria y León.
A este respecto, Almudena Vidorreta cree que “han apostado fuerte por nosotras: han aparecido anuncios por todas partes y se ha creado una expectativa grande. Si soy sincera –continúa la más joven Pandora- casi agota un poco la idea de las antologías de chicas, pero admiro la obra de varias de estas poetas y compartir el libro con ellas me pareció una idea estupenda”.
Brenda Ascoz coincide al señalar que el libro “supone una gran oportunidad en el tupido bosque de la poesía actual”. Sobre sus textos, algunos inéditos y otros ya conocidos, afirma que “los poemas fueron elegidos en función del tono general de la antología, aunque decidí incluir un par de ellos de voz más personal con el fin de quebrar un poco la homogeneidad y así conjugar aquello que me une al resto de poetas con lo que me separa de ellas”. Christian Peribáñez
El libro
JUGANDO CON LA CAJA PROHIBIDA
Dice la mitología griega que Pandora, creada a imagen y semejanza de los dioses, fue la causante de los males de la humanidad al destapar una cajita que contenía un amplio repertorio de desgracias. Quizá un libro de poesía –aquella arma cargada de futuro- no pueda desencadenar plagas como las de Egipto, pero puede servir para escarbar en las conciencias y disfrutar de voces pasionales, combativas y feroces como la Pandora misma.
“No hemos seguido ningún criterio generacional ni estético, he preferido decantarme por la visceralidad” explica el antólogo Vicente Muñoz, que ha reunido en “23 Pandoras” (Baile del Sol, 2009), a otras tantas mujeres jóvenes que se asoman con fuerza a la lírica española. “No quería voces que fueran academicistas, del canon clásico de la poesía, sino textos más pasionales que conviertan al lector en su cómplice”, explica Muñoz sobre la obra que anoche se presentó en El Pequeño Teatro de los Libros de Zaragoza (C/ Silvestre Pérez, 21).
La antología, que “no es una nómina cerrada ni sectaria, sino tan solo un botón de muestra”, incluye a tres jóvenes poetas aragonesas: Brenda Ascoz, Carmen Ruiz y Almudena Vidorreta, la más joven de las 23 reseñadas. También aparece en el libro Miriam Reyes, que aunque es gallega, se ha “formado” en Zaragoza, con lo que se puede decir que Aragón aporta tres poetas “y media” al listado de pandoras. Del norte llegan escritoras “con un tono más intenso, serio, reposado”, las voces del sur son –acaso- “menos graves, más frívolas, jugando con lo cómico”, opina Muñoz, que se felicita porque las autoras “son muy versátiles: hay actrices, blogueras, diseñadoras, y no se identifican con el papel tradicional de la poetisa aislada”.
Precisamente, una de las más “teatreras” es Carmen Ruiz, para quien el libro es “un ejemplo de la variedad del compromiso que ofrece la poesía actual escrita por mujeres. Voces intimistas, guerreras, provocadoras, reivindicativas, introspectivas… Es también una muestra interesante de trabajo colectivo, de toma conjunta de decisiones, desde el título (que generó un debate más que encendido, los mails cruzados iban que volaban) a la portada o la estructura de la obra”. Desde que comenzó a gestarse la antología, todo este proceso ha podido seguirse en el blog (http://23pandoras.blogspot.com/) , que en estos días está que echa humo debido al “tour” promocional que se están marcando las pandoras. El lunes el libro se presentó en el Fnac de Callao, en pleno centro de Madrid y, después de la presentación maña de ayer, toca visitar otras plazas como Logroño, Vitoria y León.
A este respecto, Almudena Vidorreta cree que “han apostado fuerte por nosotras: han aparecido anuncios por todas partes y se ha creado una expectativa grande. Si soy sincera –continúa la más joven Pandora- casi agota un poco la idea de las antologías de chicas, pero admiro la obra de varias de estas poetas y compartir el libro con ellas me pareció una idea estupenda”.
Brenda Ascoz coincide al señalar que el libro “supone una gran oportunidad en el tupido bosque de la poesía actual”. Sobre sus textos, algunos inéditos y otros ya conocidos, afirma que “los poemas fueron elegidos en función del tono general de la antología, aunque decidí incluir un par de ellos de voz más personal con el fin de quebrar un poco la homogeneidad y así conjugar aquello que me une al resto de poetas con lo que me separa de ellas”. Christian Peribáñez
El libro
“23 Pandoras”, al que acompaña el subtítulo “Poesía alternativa española”, está editado por Baile del Sol. El también poeta Vicente Muñoz se ha encargado de seleccionar y prologar la obra.
El ilustrador
El ilustrador
La “bizarra y tremenda” portada de “23 Pandoras” ha sido obra de Miguel Ángel Martín, uno de los autores más representativos del cómic underground español. Martín había colaborado anteriormente en la misma editorial ilustrando los textos de “Tripulantes” y “Resaca/Hankover”.
23
Simbolismo
23
Simbolismo
No fue buscado, pero se le ha sabido sacar un provecho. El número 23, dicen, es medio mágico y tiene connotaciones misteriosas. En un principio, las jóvenes antologadas iban a ser 30, después la nómina se redujo a 21 y, finalmente, por azar, se llegó a las 23. Resulta que tal número es “místico, enigmático y magnético”.
Por cierto, que la sangre recorre todo el cuerpo en más o menos 23 segundos.
Rock y punk
Por cierto, que la sangre recorre todo el cuerpo en más o menos 23 segundos.
Rock y punk
Se dedicaban al “rock garaje” y dieron mucho de lo que hablar en los 80. The Pandoras fue una banda estadounidense, formada íntegramente por mujeres, que hizo varias incursiones en el punk y que fue liderada por Paula Pierce.
El nombre se lo pusieron como guiño a la Pandoras´s Box, una sala de conciertos del Hollywood de los años 60.
El nombre se lo pusieron como guiño a la Pandoras´s Box, una sala de conciertos del Hollywood de los años 60.
El Heraldo de Aragón. Suplemento mvt –muévete- 253, de 20 de marzo de 2009.
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