NUEVAS AVENTURAS

se terminan los días ya en esta casa, el domingo nos vamos, alrededor todo desmontado y vacío y nosotros puja que te puja con cientos de cajas, sobre todo de libros, de emperador carlos a regidor y de regidor a emperador carlos subiendo escaleras y trasladando  nuestro nido de aquí para allá... se terminan los días de huerta y jardín y el barrio húmedo al lado, el frío nos echa definitivamente de aquí y las paredes comienzan a estar ya vacías, no hay cuadros ni carteles ni posters en ellas, lo que durante más de un año fue nuestro hogar ahora está desolado, todo ajeno y extraño, extraño y ajeno, quién vendrá a vivir aquí, me preguntó, cómo lo harán, otra mudanza y casa que queda atrás, hasta cuándo los cambios, la deriva, siempre de aquí para allá, aunque es lo bueno, pienso, de  los que vivimos a salto de mata, los que seguimos de alquiler... todo alrededor vacío, destartalado e inhóspito, monedas en las fundas del sofá, cáscaras de nueces y pipas en los rincones, cinta de embalar y herramientas y papeles arrugados y bolitas de pienso de la perra y lánguidas bolsas de basura y escombros en las esquinas... y en el otro piso, amontonadas, cientos de cajas con nuestras pertenencias, libros y discos y películas y revistas y calzado y ropa usada, básicamente, que esperan tímidamente encontrar su lugar... y el dolor de espalda y de brazos y piernas, lo que queda aún por hacer, los viajes con la furgo repleta de un lado a otro, las muestras y maletas de calzado siempre conmigo y los vecinos preguntándonos qué pasa, a dónde vamos, los trámites con los caseros, los contratos y la fianza que nunca se recupera, el papeleo y la burocracia, las cosas que no encajan, las que sobran y faltan, lo que tiramos al contenedor, camisetas descoloridas de los fuzztones y de los cramps y tom waits, viejas chupas de cuero que me acompañaron en cientos de noches sin huella, absurdos minerales y fósiles y conchas de playas lejanas y un montón de cosas inútiles de las que me tendría que haber liberado hace ya tiempo... allá vamos los tres, wendy y julia y yo, con los bártulos a cuestas y la poesía y la fotografía y la música a otra parte, con nuestros proyectos y huesos a otro lugar, y el mundo que gira y que gira y la vida que sigue y la nave que va...

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