GOOD BYE BABILONIA

un par de visitas más, sólo dos, nada más dos, y a vaciar la furgoneta de maletas y muestras para convertirla en chalet de verano hasta la campaña próxima: los colchones y los sacos, las mochilas, las toallas, la cocina, las cazuelas y sartenes, las botas de montaña, las sandalias de cuero y las chanclas de goma, las guías de viaje, los libros de maestros antiguos y amigos, la sombrilla y demás artilugios de playa, pura vida a partir de ya...

y qué distinto veo el mundo ahora, con sólo dos visitas pendientes, cuando conduzco y contemplo la exuberante primavera y me ensimismo y pienso en lo mucho que ha quedado atrás, docenas de clientes, de visitas, de ciudades y pueblos, rajando de estupideces y siguiendo la corriente a todo el mundo para poder llegar justo a este punto nomás: el fin de la ruta.

he recogido ya a la niña wen, he salido ya al monte a buscar setas (y pedazo de boletus que he encontrado), comí ayer con mis padres y duermo ya a diario abrazado a mi pareja en la cama...

good bye babilonia

bienvenida libertad

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