Hay vidas que van quedando atrás,
secuencias de lo que pudimos ser,
lo que soñamos,
que el tiempo se encarga de olvidar
aunque al final siempre es lo mismo:
el eco de una voz extraña en el recuerdo
y la añoranza de cuanto perdimos,
la desilusión de la memoria
al errar tantos caminos
en eso estriba todo:
secuencias de lo que pudimos ser,
lo que soñamos,
que el tiempo se encarga de olvidar
aunque al final siempre es lo mismo:
el eco de una voz extraña en el recuerdo
y la añoranza de cuanto perdimos,
la desilusión de la memoria
al errar tantos caminos
en eso estriba todo:
vivir sólo un presente
con tantas vidas dentro abrasándonos,
quemándonos de impaciencia
y duda frente al horizonte inmenso
de nuestra pluralidad.
.
con tantas vidas dentro abrasándonos,
quemándonos de impaciencia
y duda frente al horizonte inmenso
de nuestra pluralidad.
.
Vicente Muñoz Álvarez, de Privado (Baile del sol, 2005).
Obra:
Elegía a mi hijo no nacido by Hipónimo & Hiperónimo. Fotografía b/n 35 x 35 cm.
De la Exposición Arañados Signos, en paralelo a Versátil.es. IV Festival de la Palabra Valladolid, 2009.
Obra:
Elegía a mi hijo no nacido by Hipónimo & Hiperónimo. Fotografía b/n 35 x 35 cm.
De la Exposición Arañados Signos, en paralelo a Versátil.es. IV Festival de la Palabra Valladolid, 2009.
Buen poema y tan cierto. Me gusta mucho.
ResponderEliminarGracias
el horizonte inmenso de nuestra pluralidad.
ResponderEliminarMe ha encantado.
un abrazo
A mí también me gusta mucho este poema. Muy buenas, inmejorables las palabras escogidas en la última estrofa.
ResponderEliminarY algo aquí dentro, se encoge un poquito.
ResponderEliminarTe quedas pensando,lo vuelves a leer.
Me encanta. Sencillamente me encanta.
Gracias.