Basada en hechos y testimonios reales, The last confession of Alexander Pearce (2008), de Michael James Rowland, reconstruye la dramática historia de evasión, supervivencia y canibalismo de este presidiario irlandés en Tasmania, enfrentado, junto a otros convictos, a la furia de la naturaleza, la penuria extrema y el hambre.
Antes de ser ejecutado en 1824, Pearce le confiesa a un sacerdote (Conolly, por cuyo diario se conocen los hechos) su historia sin escatimar detalles, pero intentando justificar sus actos: "un estómago lleno es prerrequisito para las buenas maneras. Sin eso, ningún hombre sabe qué le obligará a hacer el hambre", afirma.
Lo que el hambre le obliga a hacer, en última instancia, es ir devorando uno por uno a todos los miembros del grupo, hasta quedar sólo él y otro recluso enfrentados...
Objetiva y nada sensacionalista, convincente y tremenda, esta película (prácticamente un documental) reúne todos los ingredientes necesarios para convertirse con el paso del tiempo en un film de culto.
Una recomendación 5 estrellas 5 para este domingo lluvioso en la Tierra.
v
Trailer in You Tube
http://www.youtube.com/watch?v=6pMBtD8dNIQ
Antes de ser ejecutado en 1824, Pearce le confiesa a un sacerdote (Conolly, por cuyo diario se conocen los hechos) su historia sin escatimar detalles, pero intentando justificar sus actos: "un estómago lleno es prerrequisito para las buenas maneras. Sin eso, ningún hombre sabe qué le obligará a hacer el hambre", afirma.
Lo que el hambre le obliga a hacer, en última instancia, es ir devorando uno por uno a todos los miembros del grupo, hasta quedar sólo él y otro recluso enfrentados...
Objetiva y nada sensacionalista, convincente y tremenda, esta película (prácticamente un documental) reúne todos los ingredientes necesarios para convertirse con el paso del tiempo en un film de culto.
Una recomendación 5 estrellas 5 para este domingo lluvioso en la Tierra.
v
Trailer in You Tube
http://www.youtube.com/watch?v=6pMBtD8dNIQ
No hay comentarios:
Publicar un comentario